A pesar de que sea una madera de un modelo reciente, este palo tiene muchas picaduras profundas en la parte posterior de la cabeza. Además, los rasguños en la parte superior de la cabeza son un signo de que el palo no ha recibido ningún cuidado y que probablemente nunca se haya usado con una cubierta. Evidentemente, este palo no cumple con nuestros requisitos y lo devolvimos a su dueño.
Este hierro se ha usado tanto que la capa protectora de la cara de la cabeza se ha desprendido. Estas marcas son muy comunes en los palos que han tenido un gran uso, de hecho muchos de estos hierros son los favoritos de muchos usuarios para entrenar, ¡el hierro 6 o 7 pasa mucho tiempo en el campo! Si tiene estas marcas sólo en el wedge, puede vendernos el set completo de hierros 3-9.
Como en el hierro anterior, este wedge ha tenido un desgaste excesivo en la suela que ha provocado el deterioro del acabado de cromo.
En este híbrido, podemos ver unos cuantos rasguños y picaduras, pero hay algo más grave. Hay un gran vacío entre la férula y el cuello del palo, lo que indica que la cabeza se desprende de la varilla. Este palo está en unas condiciones pésimas y no lo compraríamos.
Otro motivo por el que Golfbidder rechazara un palo son las férulas rotas. Como puede ver en la foto, la férula (el anillo de plástico negro en la junta de la cabeza y varilla) está agrietada y rota.
Es muy importante tener en cuenta las picaduras que pueden haber en un palo. Las picaduras pueden provocar corrosiones muy localizadas que pueden dar lugar a pequeños agujeros en el metal. En los palos de golf, las picaduras se producen en las varillas de acero cromado, donde la capa de protección ha sido atacada por la corrosión. Primero, aparecerán manchas de óxido en la varilla (algo muy fácil de evitar, basta con limpiar los palos después de usarlos). Las varillas que ya tengan picaduras, no se podrán reparar y se propagaran a otras zonas de la varilla, haciéndola muy frágil. Si en su palo de golf hay picaduras, entonces no lo podríamos comprar ya que no podremos garantizar su buen estado a futuros clientes.